Plásticos

Plásticos

Introducción

La invención del plástico basado en polímeros sintéticos en el año 1907 ha cambiado  nuestras vidas para siempre. Para mejor por la enorme comodidad asociada a este material pero también para peor como veremos a continuación.

Podemos definir en términos muy generales los plásticos como polímeros orgánicos sintéticos (moléculas sintéticas gigantes compuestas de largas cadenas de moléculas más cortas llamadas monómeros) derivados principalmente de los combustibles fósiles.  A estas largas cadenas de monómeros ensamblados se les añaden otras sustancias químicas llamadas aditivos para dar al producto final unas características específicas deseables.

Estos polímeros están hechos en grandes volúmenes y su pureza puede variar enormemente.

Es precisamente la capacidad de formar largas cadenas moleculares ininterrumpidas la clave de su utilidad, ubicuidad y durabilidad, partiendo de resinas plásticas que son presionadas, enrolladas, estiradas, y extruídas en todas las formas imaginables. (1)

El plástico es uno de los materiales más versátiles que jamás se ha producido

Y confiere diversas propiedades muy deseables a los artículos, es duradero, ligero, maleable, y además…¡barato!.

Hemos construido nuestras sociedades en torno al plástico, vivimos rodeados de este material, el cual influye en la forma en la que empaquetamos, comemos, viajamos, nos vestimos y vivimos ya que se encuentra en nuestra ropa, cosméticos, productos de limpieza, bolsas, botellas, envases, prótesis, lentes, dispositivos médicos, bolsas para alimentación intravenosa y otros tratamientos intravenosos, juguetes, piezas de automóviles y de cualquier medio de transporte, revestimientos y resinas usados en los materiales de construcción e industria entre ellas la alimentaria, gránulos de goma reciclados usados en los neumáticos con acaban en las pistas de césped artificial donde juegan los niños o en los losas que acolchan la caída de los pequeños en parques de juegos infantiles, y se encuentran incluso en el interior de guarderías… y un largo etc. 

El uso del plástico como sustituto de materiales tradicionales, y como base para nuevas categorías de materiales, ha crecido exponencialmente desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, cuando los productores de plástico buscaron nuevos mercados de consumo para los materiales y las instalaciones de producción construidas durante la guerra.

Un reciente análisis de todo el plástico fabricado estima que la producción mundial ha aumentado de dos millones de toneladas métricas (Mt) en 1950 a 380 millones de toneladas métricas en 2015.(15)

Este crecimiento en la producción, puede acelerarse aún más, impulsado por el auge del gas de esquisto que es barato y que procede del fracking, haciendo que las materias primas primarias para el plástico sean baratas y abundantes. En base a modelos de inversión más recientes, las estimaciones indican que la producción de etileno y propileno, los dos principales precursores usados para la producción del plástico, aumentarán en un 33-36%, aproximadamente hasta 100 millones de toneladas métricas para 2025. (1)

Uno de sus principales problemas es su alta persistencia y baja biodegradación

La biodegradación del plástico es el proceso por el cual éste se descomponen en dióxido de carbono, metano y agua; para ellos se requiere la acción microbiana. Este proceso depende de la temperatura y, en algunos casos la degradación completa sólo puede lograrse por encima de los 50°C. Estas condiciones no son muy habituales y menos aún en los ecosistemas marinos. Por tanto el plástico apenas se degrada y se acumula.

Aproximadamente dos tercios de todo el plástico jamás producido ha sido liberado al medio ambiente  y permanece ahí de alguna forma...

Como escombros en nuestros océanos, como micro o nanopartículas en el aire, en la tierra, en los suelos agrícolas, en los mares… afectando a la preciosa diversidad del planeta y dañando nuestros frágiles ecosistemas de los que todos dependemos. Además la contaminación generalizada de éstos está afectando ya a la salud humana, ya que el plástico ha entrado en nuestra cadena alimentaria y en nuestras reservas de agua, podemos respirar las micro y nanopartículas y acaba depositado en nuestro organismo causando graves daños a la salud.  

Impactos asociados al plástico

La preocupación sobre los impactos debidos al aumento de su producción uso y consumo emergieron ya en los años 70, pero el aumento en su produción ha experimentado un crecimiento sustancial en las dos últimas décadas, concretamente en los últimos 15 años se ha producido más de la mitad de todo el plástico jamás creado y la escala de producción crece cada día. (1)

La contaminación por plásticos y microplásticos de los océanos es una consecuencia muy visible pero está lejos de ser la única. No debemos considerar solo los problemas asociados al plástico como material sino que también todos los problemas que derivan de la enorme cantidad de productos químicos que tienen que ver con el ciclo de producción y uso del plástico. Para poder conocer los impactos  “ocultos” del plástico tenemos que empezar por entender todo su  ciclo de vida.

Antes de que el plástico llegue al consumidor y mucho antes de que llegue al medio ambiente, ya se han producido muchos impactos asociados a la extracción del petróleo, refinado, transporte y fabricación del plástico.

Si se considerase en términos económicos la internalización de todos los costes asociados a la reparación de los graves daños causados a la salud y al medio ambiente (en los casos en los que fuese posible una reparación, ya que un gran número de daños son irreparables) el precio del plástico tendría que aumentar drásticamente y se convertiría de un material inaccesible.

Como hemos dicho arriba, antes de que el plástico llegue al consumidor ya ha producido graves impactos a la salud de muchas personas y al medio ambiente. Veámos

Como veremos a continuación los productos químicos tóxicos y peligrosos están estrechamente vinculados al plástico. La extracción de los productos a partir de los cuales se sintetizan los monómeros genera emisión de muchos gases contaminantes, también la fabricación de monómeros libera muchos de los principales reactivos a la atmósfera, dañando así la salud de los trabajadores expuestos y poblaciones vecinas, los propios monómeros y aditivos añadidos al plástico también suponen una carga de toxicidad y contaminación importante.

 

Principales contaminantes peligrosos liberados antes de que el plástico llegue al consumidor

El 99% de la materia prima de los plásticos proviene de combustibles fósiles de todo tipo.  Los primeros plásticos derivaban del carbón, actualmente éste sigue siendo una materia prima importante en algunas regiones, como en China, pero su producción mayoritaria a día de hoy proviene de la mezcla de petróleo y gas, dependiendo en gran medida de la disponibilidad y el costo de las materias primas clave.  Por tanto la contaminación asociada a las actividades de extracción sería la primera en considerar dentro del ciclo de vida del plástico.

Durante la fabricación de los polímeros también se utilizan multitud de productos químicos, (materias primas, disolventes, subproductos, monómeros, aditivos….) que se liberan y emiten y que son peligrosos contaminantes del aire, como el 1,3 de butadieno, benceno, estireno y tolueno. Estos gases, pueden ser difíciles de detectar, ya que algunos son incoloros y tienden a tener un leve olor o incluso nulo para algunas personas.

Estos químicos, así como otros no descritos aquí son liberados y emitidos a la atmósfera en las fases de producción, convirtiéndose en una gran amenaza para la salud, muy especialmente para la de los trabajadores y la de las poblaciones cercanas a estas instalaciones.  

1,3-Butadieno

En un gas inflamable e incoloro con un suave olor a gasolina, se utiliza como un producto químico intermedio para la fabricación y como monómero para hacer goma, plástico, y otros polímeros. Su exposición a corto plazo puede causar irritación de los ojos, garganta, dolores de cabeza, fatiga, descenso en la presión sanguínea y en el pulso, daño al sistema nervioso central, e inconsciencia. La exposición a largo plazo puede causar cáncer y un aumento en la leucemia infantil. Por ejemplo, un estudio realizado en la facultad de medicina de la Universidad de Texas informó de que los niños que vivían a menos de dos millas del canal de navegación de Houston, donde se encuentran numerosas plantas industriales, tenían un riesgo 56% mayor de desarrollar leucemia linfocítica aguda que los niños que vivían a más de diez millas del canal (1,3)

Benceno

Es un líquido inflamable e incoloro de olor dulce, se utiliza como un disolvente químico que ayuda a formar los monómeros a partir de los cuales se hacen las resinas de plástico, nylon y fibras sintéticas. El benceno se libera principalmente de la industria, a través de disolventes industriales, pero también se emite durante la quema de carbón,  petróleo y del humo del tabaco.

La exposición al benceno puede tener graves repercusiones en la salud. De hecho, se sabe desde finales del siglo XIX, que el benceno es un potente veneno para la de médula ósea. (1,4) La exposición a corto plazo al benceno causa dolores de cabeza, temblores, somnolencia y mareos, y la exposición a altos niveles de benceno puede incluso llevar a la muerte en varios minutos u horas.(1,5)

También se ha estudiado que una exposición más larga, o de toda una vida, puede causar diversas enfermedades, incluida la anemia y leucemia. (1,6) Además, los estudios han demostrado que en las comunidades donde se libera el benceno en el aire procedente de las plantas industriales, hay mayores casos de algunos cánceres de la sangre, específicamente linfoma no Hodgkin.  Las mujeres expuestas a una cierta concentración de benceno a través de la contaminación del aire también pueden experimentar daños en su salud reproductiva,  incluyendo entre estos daños ciclos menstruales irregulares y ovarios subdesarrollados. (1, 7).

Estireno

El estireno, es un líquido altamente explosivo y sin color, se usa en la producción del plástico de poliestireno y resinas. Se libera al aire y puede migrar a la comida envasada en poliestireno.

La exposición limitada al estireno puede causar irritación de los pulmones, los ojos, la nariz y la piel. La alta exposición puede causar cambios en la visión, tiempos de reacción más lentos, problemas para mantener el equilibrio e incluso cáncer.

Tolueno

Es un líquido incoloro con un olor dulce. Se utiliza en la producción de otros productos químicos, como el benceno, y en la producción de polímeros como el polietileno tereftalato (PET), un componente clave de las botellas de plástico y del nylon, entre otros productos. El tolueno se libera en el aire durante la producción de polímeros, a través de su uso como disolvente, y durante el uso de productos que contienen tolueno. La exposición a corto plazo a niveles bajos o moderados de tolueno puede causar fatiga, debilidad, pérdida de memoria, náuseas y pérdida de apetito.  La exposición a largo plazo puede causar irritación de los ojos o los pulmones, dolores de cabeza y mareos. El tolueno también puede afectar a los sistemas nervioso y reproductivo y causar problemas de desarrollo en los niños. (1,8)

 

Etano

El etano, un subproducto del gas natural extraído a través del fracking, se utiliza para la producción de plástico convirtiéndolo antes a etileno. Las plantas de craqueo de etano son instalaciones industriales construidas expresamente para convertir el etano a etileno y poder usarlo en la producción de plásticos. En este proceso de transformación a etileno se produce la emisión de dióxido de azufre (SO2), óxidos de nitrógeno(NOX) y una gran variedad de Compuestos Orgánicos Volátiles (COVs), así como materia particulada, plomo y monóxido de carbono. La combinación de NOx y COVs en presencia de la luz solar generan ozono (O3) en la troposfera. Además, dentro de los volátiles se pueden liberar sustancias muy peligrosas como la acroleína y el benceno.

Toda esta contaminación está asociada a una amplia variedad de impactos en la salud. A bajos niveles se ha descrito: irritación de ojos y garganta, náuseas, dolor de cabeza y hemorragias nasales. A niveles mal altos problemas graves de riñón, hígado y sistema nervioso central. La literatura científica también lo ha relacionado con alergias y problemas respiratorios como el asma, y algunos son conocidos o sospechosos carcinógenos. (1, 9)

 

Propileno y Óxido de Propileno

El propileno, un gas incoloro con un ligero olor a petróleo, es un producto químico intermedio en la producción de plástico (incluyendo fibras de alfombras) y sustancias químicas finas. La exposición al propileno en cantidades moderadas pueden causar mareos, somnolencia y inconsciente. (1,10)

El óxido de propileno, una sustancia altamente inflamable, volátil, líquido incoloro, se utiliza en la creación de plástico de poliuretano y otros poliéteres. El óxido de propileno ha sido clasificado como un probable carcinógeno humano. A través de la exposición a corto plazo, puede causar que irritación en ojos y vías respiratorias y un leve depresor del sistema nervioso central. (1,11).

 

 

Hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAPs)

Hay más de 100 químicos distintos clasificados como Hidrocarburos Aromáticos Policíclicos, (PAHs), se generan durante la combustión incompleta del carbón, aceites, gases, madera, residuos domésticos, y en general substancias de origen orgánico. Se encuentran de forma natural en el petróleo, el carbón, depósitos de alquitrán y como productos de la utilización de combustibles, ya sean fósiles o biomasa. Pero también en la producción de plásticos. Los HAPs están reconocidos como tóxicos ambientales y pueden causar muchos impactos en la salud. Concretamente algunos de ellos son cancerígenos en humanos.

Los HAPs que están especialmente vinculados con la producción de plásticos son el antraceno, fenantreno y pireno.

 

 

 

Dentro de los HAPs

Antraceno

En un entorno de alta exposición a los HAPs, los animales de laboratorio, incluyendo ratas preñadas expuestas mediante ingestión e inhalación tuvieron problemas reproductivos, tumores, bajo peso al nacer, y distintos problemas congénitos. Se sabe que la exposición humana al antraceno produce dolores de cabeza, nausea, pérdida de apetito e inflamación o hinchazón del estómago e intestinos. Además el antraceno retrasa el tiempo de reacción en humanos y puede causar sensación de debilidad. La exposición aguda puede causar daños en la piel, incluidas sensaciones de ardor o picor, y acumulación de líquido en los tejidos corporales. (1,12).

Fenantreno

Cuando los ratones se expusieron a grandes cantidades de fenantreno a través de los alimentos, la piel y el aire, experimentaron problemas reproductivos, bajo peso al nacer y defectos de nacimiento, junto con problemas en la piel y en el sistema inmunológico (1,13).

Pireno

Los ratones que fueron alimentados con pireno desarrollaron nefropatía, una enfermedad renal que puede terminar en insuficiencia renal y cambios en la sangre, disminución del peso de los riñones y aumento del peso del hígado. (1)

Productos acabados

Los productos acabados contienen mezclas complejas de químicos,

Como son las pequeñas cantidades de monómeros residuales y moléculas relacionadas además de muchos aditivos. Durante y después de su uso, los polímeros pueden descomponerse en componentes más pequeños o en sus monómeros constituyentes, un ejemplo claro ocurre cuando algunos se exponen al agua y a la luz solar. Como ya hemos dicho los aditivos se añaden para conferir determinadas propiedades, como aumentar la resistencia o hacerles más flexibles. También se añaden para mitigar en lo posible los efectos desestabilizadores de la luz solar, o prevenirlos de amarillear con la edad. Muchos plásticos incluyen una gran concentración de retardantes de llama, que tienen como objetivo disminuir su inflamabilidad.

La gran cantidad de productos químicos perjudiciales para la salud que finalmente contienen los artículos de plástico, (monómeros y aditivos) representan la barrera esencial para llegar a la transición sostenible que necesita el planeta. Podemos afirmar que, “…el problema de los plásticos es un problema de seguridad química. “(16)

Hay una amplia variedad de monómeros utilizados para hacer plásticos comunes de los que se reportan graves consecuencias para la salud.

Además los aditivos no suelen estar ligados al material plástico propiamente dicho y son preocupantes para la salud. Esta débil unión hace que durante su uso o posteriormente en la eliminación del plástico se liberen los aditivos, suponiendo una fuente de exposición importante. Muchas de las familias químicas más numerosas y peligrosas, incluidos los metales pesados, los retardantes de llama, los ftalatos, bisfenoles y los compuestos fluorados, son aditivos directamente relacionadas con la producción de plásticos.

Los trabajadores de las plantas de fabricación de plásticos, también se ven expuestos a los monómeros y aditivos con los que trabajan, ya que están generalmente expuestos a altas concentraciones de estas sustancias. También hay trabajadores que no están dentro de las fábricas de producción pero si están relacionados con estas sustancias: cajeros que manejan el papel de recibos, empleados de salones de uñas, envasadores en contacto con tal cantidad de material plástico…

Respecto al asunto de los productos químicos aditivos y monómeros recomendamos la lectura del informe: Turning the plastic tide: The chemicals in plastics that put our health at risk. HEAL. Sep. 2020 (16) que es una de las fuentes documentales de este texto.

A continuación vamos a exponer las tablas de los principales monómeros plásticos y aditivos.

La clasificación de los monómeros está hecha en función del número que aparece en la parte baja de determinados artículos de plástico, a objeto exclusivamente de facilitar el reciclaje, no de dar una información adecuada al consumidor para que pueda valorar sus peligros.

Categorías de aditivos y ejemplos

POLÍMEROS PLÁSTICOS COMUNES Y SUS MONÓMEROS ASOCIADOS

Fuente: Turning the plastic tide: The chemicals in plastics that put our health at risk. Health and Environmental Alliance. September 2020.

CATEGORÍAS DE ADITIVOS Y EJEMPLOS

Fuente: Turning the plastic tide: The chemicals in plastics that put our health at risk. Health and Environmental Alliance. September 2020.

Bisfenoles (16)

El BPA, o bisfenol A, es el más conocido de un grupo muy grande de sustancias utilizadas para multitud de aplicaciones. Por ejemplo, el BPA y el otros bisfenoles se utilizan como monómero constituyente de algunos plásticos de policarbonato; en las resinas epoxi selladoras en latas y como relleno; como recubrimiento en botellas de agua de aluminio; y como tinta en papeles térmicos de recibo. De todos los bisfenoles, sólo el BPA, un tóxico para la reproducción y un disruptor endocrino bien conocido ha sido parcialmente restringido a nivel europeo (está prohibido en los biberones y restringido en el papel térmico y juguetes para niños de hasta tres años). Los científicos han vinculado la exposición al BPA a una serie de condiciones de salud entre las que está el cáncer de mama, infertilidad, pubertad temprana, diabetes y obesidad, y problemas neurológicos y alteraciones del comportamiento en niños.

Desafortunadamente, a medida que crecen las preocupaciones sobre el BPA, la sustancia química está empezando a reemplazarse cada vez más por otras bisfenoles, como el BPS, BPF, BPAF, y BPZ. Muchos de estos bisfenoles alternativos, que están estrechamente relacionados al BPA, también parecen tener una toxicidad similar. En 2017, la Agencia Sueca de Química identificó unos 37 bisfenoles como potenciales disruptores endocrinos.

Este tipo de sustituciones es lo que se llama Sustituciones lamentables y sobre las que pedimos más seriedad y que se regule definitivamente toda la familia de bisfenoles.

Ftalatos

Los Ftalatos son compuestos sintéticos que se utilizan como aditivos en una miríada de productos de consumo porque añaden flexibilidad y otras características muy deseables.

Los ftalatos se añaden comúnmente al cloruro de polivinilo (PVC), pero no exclusivamente. Las investigaciones científicas de los últimos años, se ha vinculado a los ftalatos con una gama de impactos en la salud, incluyendo los trastornos reproductivos, sobrepeso, resistencia a la insulina, asma, y el trastorno de hiperactividad por déficit de atención.

Desechos del plástico

Todas estos polímeros con sus correspondientes aditivos plásticos también suponen un problema una vez que se ha usado el producto que lo contiene, es decir como deshechos, a pesar de que muchos de los aditivos ya se hayan liberado durante su uso y hayan pasado a contaminar el ambiente o directamente a los consumidores de tales productos.

Hay que tener en cuenta que las tasas de reciclaje en Europa son bajas, aún así son más altas que en EEUU.

En 2016, de los más de 27 millones de toneladas de residuos plásticos recogidos en Europa, más de El 40% fue incinerado, mientras que sólo el 30% fue reciclado, y aproximadamente la misma cantidad se eliminó en los vertederos (18).

Estos datos son muy malos. La incineración del plástico genera la emisión y liberación de muchas sustancias muy tóxicas y perjudiciales para la salud como las dioxinas cloradas, furanos y metales pesados principalmente pero no exclusivamente ya que lamentablemente se liberan otras muchas sustancias. Además éstas se degradan fácilmente, son sustancias persistentes y bioacumulables, con un potente efecto disruptor endocrino, su persistencia les hace capaces de transportarse miles de kilómetros y se han encontrado en cualquier punto de la tierra. También se biomagnifican a lo largo de la cadena alimentaria., pudiendo encontrarse dioxinas en los animales de la zonas remotas del artico. Por tanto este tipo de contaminación debida a la incineración de plásticos no solo afecta a los trabajadores d estas industrias y poblaciones próximas sino al mundo entero.

El depósito en vertedero también genera grandes impactos ambientales. Aunque actualmente los vertederos están diseñados con sistemas de sellado mucho más seguros que hace décadas, es muy común poder encontrar roturas en las láminas y sistemas de sellado, debido a los propios asentamientos de la basura y a la desgasificación. Esto puede ocasionar y ocasiona lixiviación de todos los químicos tóxicos contenidos en los plásticos y restos de material de deshecho que acaban contaminando los suelos y todas las fuentes de agua subterráneas en la proximidad y aguas abajo del emplazamiento.

 

Además, debido a que el plástico no se degrada fácilmente, los plásticos acumulados en los vertederos superan con creces las vidas humanas, se necesitan de 400 a 1.000 años para que se degrade (16,15). Se espera que para el año 2050 acaben en vertedero o en el medio ambiente natural 12 billones de toneladas métricas de plástico (16,15), por tanto con el ritmo de biodegradación que tiene, la cantidad de terreno necesario para enterrar este tipo de basura será exagerado, así como los impactos asociados.

 

El reciclaje del plástico sería la solución más adecuada, pero para que esto se convirtiera en una “buena solución” habría que dejar de introducir en los plásticos primarios, toda la cantidad de químicos tóxicos que tienen.

Además para poder alcanzar los objetivos de llegar a una verdadera economía circular también habría que dejar de añadir nuevos químicos tóxicos en los procesos de transformación del plástico para una segunda vida.

Un ejemplo muy concreto de esto lo tenemos en el plomo que se añade al PVC reciclado para darle una segunda vida, o el DEHP prohibido en la UE desde el 2015 para algunos usos y permitido en el PVC reciclado.

Impactos para la salud humana y ambiental del ciclo de vida del plástico

Fuente: TURNING THE PLASTIC TIDE: THE CHEMICALS IN PLASTIC THAT PUT OUR HEALTH AT RISK – HEALTH AND ENVIRONMENT ALLIANCE, 2020.

Normativa:

A pesar de estas preocupaciones inherentes al plástico, los polímeros están exentos de registro en el marco del reglamento europeo de productos químicos REACH.

 
Esto significa que las empresas no están obligadas a proporcionar información sobre los peligros para la salud y el medio ambiente relacionados con su exposición, ni para vigilar su destino en el medio ambiente y la cadena alimentaria, una laguna que las ONG han pedido repetidamente a las autoridades europeas que se cierre. (16)

Conclusiones:

Actualmente, a pesar de que conocemos en algunos artículos cuál es el polímero principal para facilitar el reciclado, existe una total falta de transparencia por parte de los productores de cuáles son los productos químicos contenidos en el plástico, así como de sus procesos de producción. Esto impide una evaluación completa de todos sus impactos y limita la capacidad reguladora para poder tomar las medidas preventivas necesarias, muy especialmente en las poblaciones cercanas a las fábricas de producción, que soportan una gran carga de enfermedad. Esta opacidad también reduce el derecho de los consumidores a tomar decisiones informadas.

El asunto del plástico es complejo puesto que hemos configurado nuestras sociedades en torno a este material, por lo que para abordar todos los impactos asociados a este material habría que tener una firme y decidida disposición de hacer los cambios necesarios a objeto en primer lugar de detener el ritmo de crecimiento de producción y comenzar a invertirla.

La prohibición de los plásticos de un solo uso es buen comienzo para esto. Solo el 30% de todos los plásticos que se han producido siguen todavía en uso.  Los microplásticos añadidos intencionadamente deberían de ser automáticamente prohibidos en todos los mercados por los graves impactos que generan.

También habría de conocerse en detalle todos los productos químicos y procesos de fabricación para poder someter a las restricciones adecuadas todas aquellas sustancias peligrosas, incluidas todas las que tienen propiedades Disruptoras Endocrinas.

Finalmente habría que apostar por el reciclaje para llegar a una verdadera economía circular, esto se conseguirá cuando se retiren del mercado todos los productos químicos que representen una amenaza para la salud del ser humano en primer lugar y de todos los seres vivos del planeta.

 

Referencias

  1. Plastic and health. The hidden cost of a plastic planet. CIEL, Healthy babies bright future, ARNIKA, National Toxic Network Australia, International POPs elimination network,-IPEN.
  2. Primary microplastics in the Oceans: A global Evaluation of Sources. Julien Boucher, Damien Friot. IUCN. 2017
  3. Ver Kristina M. Walker, Ann L. Coker, Elaine Symanski & Philip J. Lupo, A Preliminary Investigation of the Association Between Hazardous Air Pollutants and Lymphohematopoietic Cancer Risk Among Residents of Harris County Texas (Univ. of Tex. School of Public Health 2007). https://pdfs.semanticscholar.org/3b67/75f96037b7dd2104a11296784f52d4cddf33.pdf.
  4. Ver Peter F. Infante, Benzene: an historical perspective on American and European occupational setting, in Late Lessons from Early Warning: the Precautionary Principle 1896-2000 38, 38-51 (Eur. Envtl. Agency 2001).
  5. Ver U.S. Envtl. Prot. Agency, Benzene (rev. Jan. 2012), https://www.epa.gov/sites/production/iles/2016-09/documents/benzene.pdf; see also Centers for Disease Control & Prevention, supra note 69; EurekaAlert!, Higher Cancer Incidences Found in Regions Near Refineries and Plants that Release Benzene (July 29, 2013), https://www.eurekalert.org/pub_releases/2013-07/w-hci072413.php.
  6. Ver American Cancer Society, Benzene and Cancer Risk, https://www.cancer.org/cancer/cancer-causes/benzene.html
  7. Ver Robert DeMatteo, Nat’l Network on Env’t & Women’s Health, Chemical Exposure and Plastics Production—Issues for Women’s Health: A Review of Literature (Dec. 2011), http://cwhn.ca/sites/default/files/resources/cancer/short%20lit%20review-%20EN%20-%20formatted.pdf.
  8. Ver U.S. EPA, Toluene (rev. July 2012). https://www.epa.gov/sites/production/files/2016-09/documents/toluene.pdf
  1. Report, PRETA Air: Hazardous Air Pollutants 28 (2013). http://www.chec.pitt.edu/documents/PRETA/CHEC%20PRETA%20HAPs%20Report.pdf
  2. Ver Nat’l Ctr. For Biotechnology Info., PubChem Compound Database, Propylene, https://pubchem.ncbi.nlm.nih.gov/
  3. Ver Nat’l Ctr. For Biotechnology Info., PubChem Compound Database, Propylene Oxide, https://pubchem.ncbi.nlm.nih.gov/
  4. Ver U.S. Envtl. Prot. Agency, Anthracene, https://archive.epa.gov/epawaste/hazard/wastemin/web/pdf/anthrace.pdf
  5. Ver S. Envtl. Prot. Agency, Phenanthrene. https://archive.epa.gov/epawaste/hazard/wastemin/web/pdf/phenanth.pdf
  6. https://www.iswa.org/fileadmin/user_upload/Calendar_2011_03_AMERICANA/Science-2015-Jambeck-768-71__2_.pdf
  7. Geyer, J. R. Jambeck, and K. L. Law, “Production, use, and fate of all plastics ever made,” Sci. Adv., vol. 3, no. 7, p. e1700782, Jul. 2017, doi: 10.1126/sciadv.1700782.
  8. Turning the plastic tide: The chemicals in plastics that put our health at risk. Health and Environmental Alliance. September 2020.
  9. Hogar sin tóxicos. https://hogarsintoxicos.org/es/algunas-restricciones-ftalatos-ue
  10. PlasticsEurope, “Plastic: The Facts 2018,” 2018. https://www.plasticseurope.org/application/files/6315/4510/9658/Plastics_the_facts_2018_AF_web.pdf (accessed Jun. 23,2020)